Archivo | agosto, 2014
Imagen

Is not easy

27 Ago

image

En sus marcas, ¿listos?… Fuuuuuueeeeeraaaaaaa

22 Ago

¿Preparada para correr?
En el último año, salir corriendo o correrme se ha vuelto una especialidad, con técnicas escapistas y sin que nadie lo note, simplemente desaparecer.
Si, salir corriendo, después de pasar 5 años en una y otra relación decidí darme un tiempo fuera del romanticismo, eliminarlo de lo check list. Correr o salir corriendo lo hacia cuando empezaba a sentir que la otra persona sentía algo por mi o a mi me empezaba a gustar, simplemente me ponía los zapatos tenis (algunas veces bien literal) y salia corriendo antes de que fuera muy tarde, si me quedaba o me hubiera quedado alguien hubiera terminado con el corazón roto y lo menos que quería era dejar un corazón roto, pero lo que más temía era que fuese el mío, ojo estaba en recuperación y todos los pedacitos estaban pegados con moco, así que otro rompimiento no lo iba a soportar, así que salia corriendo.
La primera vez que salí corriendo fue cuando empecé a salir con alguien y el asunto iba más allá de lo que yo quería. Obviamente yo quería estar sola, que me acompañará a la soledad pero simplemente estar soltera.
Después de eso salir corriendo era una advertencia de entrada, siempre solía decir: «no estoy preparada, no quiero nada, por favor no te enamores que yo no lo voy hacer». Obviamente cuando empezaba a sentir esa conexión lo primero que hacia era desaparecer. Simple, a como dicen con corte simples sin hacer mucho relajo, simplemente me iba con la frente en alto y lo más rápido posible, no existe explicación, ni disculpas, simplemente entrar en una conexión romántica no esta en mi check list.
Sin embargo después de salir corriendo un par de veces mi check list cambio de orden y de objetivos, deje «al maje» porque estaba clara de que no iba a ninguna parte, pero ahora viene mi crisis existencial, ¿dónde se encuentran personas que sepan que quieren y que buscan sin entrar en un juego?
Si, me refiero a un juego, algunas personas cuando dudan de ellas o quieren hacerse los difíciles crean un juego, consiste en no salir de su zona de confort, (al igual que yo hice un día) no involucrarse en el circulo social/familiar de la persona y por último (y el punto más desesperante) un día me gustas el otro no, te doy señales extrañamente incomprensibles.
Yo no juego esos juegos, entretienen, vaya que si, es vivir en una montaña rusa de grandes abismos que caer y grandes colinas que subir… Pero regreso a lo antes dicho

no quiero jugar ese juego

.
Esta vez guarde mis zapatos tenis para no salir corriendo y súper dispuesta a amar el enamoramiento, aunque pensarlo me haga retorcerme de dolor de estómago y entrar en crisis organizativa.
A como hace poco le decía a alguien que fue importante para mi años atrás,

simplemente estoy lista para dejarme llevar por el torbellino del amor, soy buena queriendo, enamorándome y viviendo la cursilería, ¿porqué no volver al riesgo?

Así que mientras tanto, estoy dispuesta a conocer personas que sepan que quieren, no que entusiasmen, calienten la comida y no se la coman… No por favor.
Para terminar:
¿Quién me quiere presentar chavalos interesantes? (Son mi debilidad)

La vida y los rebotes

14 Ago

Todos hemos tenido una situación de rebote. Ese chavalo (chavala) que aparece cuando menos lo esperamos, nos gusta, nos mueve el piso, nos ilusionamos, nos dan diferentes señas, si/no/tal vez.
La mayoría de los rebotes pasan cuando recién terminamos una relación, el famoso llamado «un clavo saca a otro clavo», nos lanzamos sin paracaídas a una vida de ir y venir de romance y cariño, sin embargo a pocos metros de tierra, cuando casi pegamos en el piso, abrimos el paracaídas y nos frenamos, caemos en la realidad de estar recién saliendo de una relación (puede que haya sido linda, terminado en las mejores condiciones o en las peores) y frenamos todo. Con el corazón en la mano nos toca tomar la decisión de comunicarle a nuestro amante bandido que el camino que lleva la situación no es la que deseamos. Al final tenemos tanto tiempo de estar en una relación y sacamos cuentas de apenas tenía un par de semanas de haber salido de la relación. Empezamos a pensar en nuestra soledad, libertad, el que dirán, lo que queremos encontrar, el tiempo para curar, etc.
Lo curioso de los rebotes es que muchas veces se vuelven en eso, un rebote, andan con ellos/ellas y después regresan con las/los ex o simplemente se vuelven en el/la majesita/o que los acompaña en las noches de oscuridad, melancolía y depresión.
Obvio hay su par de historias que los rebotes pasan a primer plano y se vuelven el «otro clavo», se agarran los ovarios o huevos y se arriesgan a vivir el romanticismo (ojo hace poco uno de mis conocidos le pidió matrimonio a su rebote novia).
Pero mi duda es la siguiente ¿cuánto tiempo tiene que pasar para que no seas el/la rebote?

El físico no lo es todo para mi

4 Ago

barbie-ken

El físico no lo es todo para mi, eso lo aprendí antes de los 18. Claro esta que de vez en cuando los gustos entran por los ojitos, pero, no lo es todo para mi.

Existen muchachos muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuy simpáticos pero con la cabeza más hueca que un árbol invadido por termitas.
Aprendí a dejar un lado lo del muchacho bonito y/o de cuerpo perfecto desde que me dí cuenta que ser bonito no significa que la persona que queres quiera estar con vos por quien sos, sino por como te ves, las superficialidades no van conmigo.
Es complicado. Aprendí que por muchas veces me dijera linda, preciosa o guapa «esa persona» no iba a estar de ninguna de las formas a como yo lo quería. Ahí decidí cambiar mi forma de percibir a los demás o más bien de que me gustaran las personas.

No suelo fijarme en los six pack, ropa de última moda, peinado exquisito o los grandes músculos; lo que más me cautiva y las primeras dos cosas que me fijo en un muchacho son: la sonrisa y los ojos, después de eso la parte intelectual, la elocuencia de las conversaciones, el CLICK (lo más importante).
Es más debo de decir que ni siquiera tengo un formato o un estereotipo de «como me gustan los chavalos» o «cómo deben de ser», siempre digo que tengan una sonrisa encantadora es suficiente (si es del físico que hablamos).
¿Porqué tendría que esperar un Ken para mi si ni siquiera soy una Barbie?